El largometraje de 53 minutos, recientemente galardonado en la V DocTv Latinoamérica, recrea a través de entrevistas y archivos el asesinato de Alfredo Marcenar y la lucha por un cambio en las políticas públicas que llevan adelante los padres de la víctima, Mónica Bouyssede y Adrián Marcenac, a través de distintas actividades en el ámbito escolar y de organizaciones, como la fundación Alfredo Marcenac y la Red para el Desarme.
Mediante la reconstrucción del asesinato ejecutado por Martín Ríos y los juicios posteriores, el filme coloca en la pantalla la problemática en la reglamentación de armas de fuego y la situación actual del Plan Nacional de Entrega Voluntaria de Armas, el rol del Estado, la lógica del mercado y el Ente Cooperador de los Fabricantes y Vendedores de Armas, y el financiamiento de la actual Agencia Nacional de Materiales Controlados (ex-Renar).
“Nos pareció muy interesante el trabajo de Mónica y Adrián y su militancia porque es gente común que no viene de la política ni de la abogacía. Es un matrimonio de clase media que aporta y logra transformar una sociedad”, manifestó Fernández, director y productor del filme, en charla con Télam.
Alfredo tenía 18 años cuando fue asesinado por Martín Ríos, bautizado como el “tirador serial de Belgrano”, quien además de haber sido hallado autor del crimen de Marcenac, fue considerado responsable de ataques a un colectivo, a una confitería y a un tren en movimiento.
Sin embargo, diez años después, Ríos fue declarado inimputable por esquizofrenia y en la actualidad se encuentra cumpliendo una medida de seguridad dentro del Complejo Penitenciario Federal I de Ezeiza al ser considerarlo “peligroso para sí y para terceros”, pero sin registros penales.
Sobre ello, Adrián expresó que “es una falta de respeto y de consideración hacia todas las víctimas porque ese mismo tribunal fue el que lo declaró culpable en un principio”.
En tal sentido, el filme denuncia el rol del Estado y de la Justicia: “¿Por qué Ríos, que tenía antecedentes con armas, problemas psiquiátricos, ningún estudio ni trabajo, tenía un arma legal?. El Estado se la dio ¿Por qué Ríos fue declarado absuelto e inimputable? Una sociedad que acepta armas es una sociedad que esta dispuesta a matar y el Estado tiene que tener precedencias y ser regulador”, enfatizó el realizador.
En tanto, Marcenac profundizó: “el sistema judicial es anacrónico, burocrático y destructor de la víctima porque protege al delincuente y le da garantías de impunidad como a este asesino. Es parte de un sistema corrupto. La víctima debe tener voz y voto en todas las instancias”.
Es por ese motivo que esta obra audiovisual cobra una gran dimensión ya que “permite resaltar y poner la problemática en la agenda. Vemos que en los medios solo muestran la punta del iceberg pero lo que no se ve es lo más trágico, las cuestiones sociales. Muchos asesinatos tienen que ver con discusiones que terminan en tragedia por la presencia de un arma y eso es lo que no se transmite por televisión. Estamos viviendo en un país sin guerra civil pero nos estamos matando igual”, se explayó Adrián.
Fueron 30.000 las personas asesinadas durante los últimos diez años a causa de un arma de fuego, un saldo de ocho o nueve personas por día y aproximadamente 35 heridos, pero sólo entre un 15 y 20% de los casos con finales trágicos están relacionados a los asaltos a mano armada.
“Oficialmente se habla de 2 millones de armas legales registradas y otro tanto no registradas, armas viejas fabricadas en la década del 60 cuando ni existía el Renar, que siguen pasándose de generación en generación. Las estadísticas que manejan los organismos arrojan que una de cada diez personas tiene un arma en su casa”, informó Fernández.
Según el director el documental “Desarme”, uno de los 17 trabajos ganadores de la quinta edición del certamen DocTV Latinoamérica bajo la consigna de “Felicidad”, es “un trabajo periodístico y con un eje duro” cuyo concepto de felicidad se entiende de una manera “colectiva. No es algo individual ni superfluo, se trata de la construcción colectiva de la felicidad y de la paz”.
Además de participar activamente de la Red Argentina para el Desarme, organización que se formó en 2004 a partir de la masacre escolar de Carmen de Patagones, y que permitió junto con el plan de Entrega Voluntaria que salieran de circulación más de 170.000 armas, Mónica desarrolla programas educativos para la construcción de la paz y la resolución pacífica de conflictos sociales en escuelas de Necochea.
A ocho años del comienzo del proyecto, Adrián subrayó que “si es sostenido y llevado adelante con seriedad, hay grandes esperanzas porque los chicos son más permeables a los cambios. Trabajamos con la paz directa con nuestros semejantes y sobre la resolución de los conflictos del día a día”, además de haber logrado la Diplomatura Superior de Educación para la Paz y el Abordaje de la Conflictividad Social, que se dictó hasta el año pasado en la Universidad Nacional del Centro y de la que se espera una renovación.
Aparte de estrenarse por la pantalla de Incaa TV el próximo jueves a las 18, “Desarme” -que contó con la producción ejecutiva de Mónica Niemira y la música original de Diego Frenkel- se transmitirá por los canales públicos de 16 países de Latinoamérica.