El Ministerio de Justicia dispuso que en agosto entre en vigencia el Código Procesal Penal Federal en la justicia federal de la Ciudad de Buenos Aires, conocida como “Comodoro Py”. Se trata de un punto de inflexión en la historia institucional de nuestro país, que impacta directamente sobre una de las mayores debilidades de nuestra democracia: la calidad del sistema de justicia encargado de juzgar al poder político y económico.
A continuación, desde el INECIP compartimos tres claves para comprender los alcances de esta decisión y sus consecuencias.